Los dones del Espíritu Santo son algunos de los mayores beneficios de la vida Cristiana. Nos permiten llegar a otros con habilidades sobrenaturales.
La Importancia de Los Dones
Jesús usó los dones del Espíritu Santo como una campana para llamar a la gente a Él y a Su mensaje. Señaló los dones sobrenaturales del Espíritu Santo que fluían a través de Él como verificación de quién era. Los cristianos del primer siglo también usaron los dones del Espíritu Santo para validar la verdad de sus afirmaciones. Si Jesús y los primeros discípulos necesitaban los dones, ¿cómo podemos prescindir de ellos? Esta es la razón por la que nuestra proclamación moderna del evangelio, sin los dones, no ha tenido el mismo impacto en nuestra sociedad que los primeros cristianos tuvieron en su día.
El Señor Siempre Está «Encendido»
El pensar que la unción viene y va nos hace ser espasmódicos al fluir en los dones. La verdad es que el Señor siempre está buscando fluir a través de nosotros en los dones del Espíritu Santo. Es solo nuestra percepción de Su presencia y unción la que fluctúa. Cada vez que nos encendemos y sintonizamos, Dios ya está transmitiendo Su amor hacia los demás, y podemos ser el canal por el que trabaja.
El Flujo Divino
Dios es amor. Siempre que sintamos el flujo divino de Su amor a través de nosotros, siempre habrá un don del Espíritu disponible para ministrar ese amor. Por lo tanto, sigan y fluyan en el amor «ágape» de Dios, y fluirán en los dones del Espíritu Santo.